Testimonio de Angelines Agudo

 

Madrid celebra el próximo domingo el "Día del misionero diocesano", una jornada de agradecimiento a las personas que han decido partir a tierras de misión. El domingo se celebrará la Eucaristía en la Colegiata de San Isidro y se procederá al "envío misionero" y la entrega de Crucifijos a 46 misioneros, 14 de los cuales son matrimonios (que en total tienen 47 hijos), 1 sacerdote y 5 religiosas, según informó a Veritas el delegado diocesano de Misiones, Jesús Pérez de Miguel.

 

      Uno de los matrimonios, del Camino Neocatecumenal, es el formado por Enrique Nieto y Angelines Agudo, que partirán con sus 9 hijos a Australia. Angelines Agudo explicó a Veritas esta mañana que cuando tenían 7 hijos estuvieron de misiones en Honduras, de donde se tuvieron que volver por la enfermedad de uno de sus hijos, que necesitaba tratamiento especializado cada tres meses y que allí no podían recibirlo.

 

      Angelines Agudo cuenta que es hija de padres misioneros y que cuando tenía 20 años vivió con sus padres en Perú. Afirma que lo que aprendió de sus padres es que "aunque aparentemente no había diferencia con otras familias que no son creyentes, cuando tus padres te demuestran que no es una tragedia no tener dinero cuando se es una familia numerosa o que la Providencia siempre te ayuda y además lo viven con naturalidad, empiezas a descubrir que son dosis de fe que te van transmitiendo".

 

      Sobre la época en la que vivió en Perú con sus padres, describió que intentaron "ser uno con ellos y hacerles ver que no pasa nada por ser pobre si tienes a Dios". La familia de Angelines estuvo con los llamados "asentamientos o pueblitos jóvenes", la zona "más pobre de Perú". "Vivías allí como un pobre más, pero dando testimonio de familia cristiana, mostrándoles que sí es posible tener un marido para toda la vida, vivir el sacramento del matrimonio y que se pueden tener hijos aunque no tengas dinero". "Les decíamos que para poder vivir así, necesitas de los sacramentos y poco a poco van viendo que la familia cristiana tiene otra forma de vivir, que es posible dignificar a la familia y que todo te lo da gratuitamente la Iglesia", añade.

 

      "Y cuando tienes tu propia familia, ves que es verdad lo que vivieron tus padres, que de repente tu marido encuentra trabajo o que un hijo viene "con un pan debajo del brazo" en cuanto que es una alegría para el matrimonio. Son cosas que tu te paras a pensar y a vivirlas desde la fe", explica Angelines Agudo. Asegura, a su vez, que "la maternidad múltiple es una bendición y que cada hijo es una alegría".

 

      Sobre la decisión de su marido y ella de irse a Honduras, dijo que "en medio de una vida insulsa, donde todo empieza a perder valor, te preguntas ¿qué es lo que nos ha dado la Iglesia? y ves que el Señor nos ha querido tal y como somos, demostrándolo en la Cruz, así que esto nos ha motivado a decir: si esto me lo han dado gratis, démoslo a otros también gratis, porque es importante dar al otro sin recibir nada a cambio".

 

      En cuanto a su próximo destino, Australia, comenta que "allí se necesita la evangelización como el comer", porque está "descristianizado y necesitan ver signos de fe en la familia cristiana". "Allí Dios no se puede mencionar porque ni siquiera existe, así que hay que hacer visible el amor de Dios en la familia y que el Señor te quiere como eres", concluye.

 

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