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En su época católica defendió con eficacia la fe frente a los paganos y frente a diversas herejías, y escribió obras teológicas y de carácter disciplinar y moral. Quizá el libro más conocido sea el Apologético: un valiente escrito dirigido a los gobernadores de las provincias romanas, para mostrarles la rectitud de vida de los cristianos, totalmente ajenos a los delitos que se les atribuían. Ya en una obra precedente, A los gentiles, había hecho otra enérgica defensa del cristianismo, dirigiéndose al mundo pagano en general. En el Apologético sigue un programa mejor delineado y más sistemático. Se propone presentar a los cristianos como ciudadanos comunes, como cualesquiera otros, cumplidores ejemplares de todas sus obligaciones cívicas, interesados por la cosa pública como el que más, dignos de todo el aprecio que los gobernantes deben tener por los súbditos buenos y leales.

 

De gran importancia son otros dos tratados: uno acerca de la oración, y otro sobre la penitencia, de los que a continuación se recogen algunos párrafos. El tratado Sobre la oración es el primero que aborda este tema en la literatura cristiana. En Sobre la penitencia es testigo de la práctica penitencial de la Iglesia y de la necesidad de confesar los pecados cometidos después del Bautismo.

                                                            Tertuliano - "Apología"             Tertuliano - "Tratado de la paciencia"    

 

Biografía

 

Los datos biográficos que conocemos de Quinto Septimio Florencio Tertuliano nos han llegado a través de San Jerónimo. Sabemos que pasó la mayor parte de su vida en Cartago, donde nació hacia el año 155. Se convirtió hacia el año 193, quizá durante sus años en Roma, donde se dedicaba al ejercicio de la abogacía. Desde entonces puso al servicio de la Iglesia su formación jurídica y una notable habilidad retórica. Fue el primero en emplear la lengua latina en la exposición teológica. Lamentablemente, al final de su vida, cayó en los errores del montanismo, una herejía de corte rigorista. Por esta razón no se le cuenta en el número de los Padres, aunque tiene gran importancia en la historia de la Iglesia. Murió en torno al año 225.